Overblog
Seguir este blog Administration + Create my blog

armas y guerras

¿Por qué el Pentágono está “convirtiendo insectos en armas”?

Publicado en por Skiper

¿Por qué el Pentágono está “convirtiendo insectos en armas”?

Fuente: https://www.globalresearch.ca/pentagon-weaponizing-insects/5658460

Traducción, orrección de la traducción y subrayado del texto relevante: Skiper

Hay pruebas contundentes de que el Pentágono, a través de su agencia de investigación y desarrollo, DARPA, está desarrollando insectos genéticamente modificados que serían capaces de destruir los cultivos agrícolas de un enemigo potencial. DARPA ha negado la afirmación, pero destacados biólogos han hecho sonar la alarma sobre lo que está ocurriendo utilizando la nueva tecnología CRISPR de “edición genética” para, de hecho, convertir a los insectos en armas. Es como una actualización del siglo XXI de la plaga bíblica de langostas, sólo que potencialmente mucho peor.

La Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa del Pentágono, DARPA, está financiando un programa con el extraño nombre "Insect Allies". El Dr. Blake Bextine de DARPA describe el programa como "aprovechando un sistema de entrega de dos pasos natural y eficiente para transferir genes modificados a las plantas: insectos vectores y los virus de las plantas que transmiten".

DARPA afirma que el programa tiene como objetivo proporcionar “contramedidas escalables, fácilmente implementables y generalizables contra posibles amenazas naturales y diseñadas al suministro de alimentos con el objetivo de preservar el sistema de cultivos de Estados Unidos.  Compruebe el lenguaje: escalable, fácilmente implementable…

En el marco del proyecto DARPA, se introducirán agentes de alteración genética o virus en la población de insectos para influir directamente en la composición genética de los cultivos. DARPA planea utilizar saltamontes, moscas blancas y pulgones para introducir virus seleccionados en los cultivos. Entre otras afirmaciones dudosas, dicen que ayudará a los agricultores a combatir el "cambio climático".

Lo que nadie puede responder, especialmente porque ni el Pentágono ni la FDA de EE.UU. preguntan, es ¿Cómo interactuarán los virus genéticamente modificados de los insectos con otros microorganismos del medio ambiente?. Si los cultivos están constantemente inundados de virus genéticamente modificados, ¿Cómo podría esto alterar la genética y el sistema inmunológico de los humanos que dependen de los cultivos?.

Alarma de guerra biológica
Dado que la mayor parte del actual suministro de alimentos de Estados Unidos está contaminado con Roundup tóxico y otros herbicidas y pesticidas junto con plantas transgénicas, uno podría dudar de la honestidad de las declaraciones del Pentágono sobre su preocupación por el actual sistema de cultivos de Estados Unidos. Un grupo de científicos europeos ha publicado un artículo científico en la edición del 5 de octubre de la revista Science , cuyo autor principal es el Dr. Guy Reeves del Instituto Max Planck de Biología Evolutiva, Plön, Alemania.

El documento señala que el programa “Insect Allies” de DARPA “tiene como objetivo dispersar virus infecciosos genéticamente modificados que han sido diseñados para editar cromosomas de cultivos directamente en los campos”. Esto se conoce como “herencia horizontal”, a diferencia del método vertical dominante de alteración de organismos genéticamente modificados (OGM) que realiza modificaciones generadas en laboratorio en los cromosomas de las especies objetivo para crear variedades de plantas genéticamente modificadas. Las alteraciones genéticas de los cultivos se llevarían a cabo mediante “dispersión a base de insectos” en la naturaleza libre.

Los científicos europeos señalan que DARPA no ha presentado ninguna razón convincente para el uso de insectos como medio incontrolado para dispersar virus sintéticos en el medio ambiente. Además, sostienen que el Programa Insect Allies podría utilizarse más fácilmente para una guerra biológica que para un uso agrícola rutinario. "Es mucho más fácil matar o esterilizar una planta mediante la edición genética que hacerla resistente a herbicidas o insectos", según Guy Reeves del Instituto Max Planck.

El artículo de Science señala que no ha habido discusión científica, y mucho menos supervisión, sobre la seguridad de tales métodos de edición de genes en campos abiertos o incluso sobre si existen algún beneficio. El Departamento de Agricultura de EE.UU. rechaza rotundamente cualquier prueba de salud o seguridad de plantas o insectos modificados genéticamente.

“Como resultado, el programa puede ser ampliamente percibido como un esfuerzo por desarrollar agentes biológicos con fines hostiles y sus medios de lanzamiento, lo que, de ser cierto, constituiría una violación de la Convención sobre Armas Biológicas (CAB)”. Hasta ahora se han gastado 27 millones de dólares de los contribuyentes estadounidenses en “Insect Allies”.

Tecnología inestable
Aunque no hay detalles disponibles, lo más seguro es que el proyecto de edición genética de Insect Allies con herramientas CRISPR-Cas utiliza lo que se llama "impulso genético". Gene Drive , que también recibe una gran financiación del DARPA del Pentágono. Con edición de genes, tiene como objetivo forzar que una modificación genética se propague a toda una población, ya sea de mosquitos o potencialmente de humanos, en tan sólo unas pocas generaciones.

El científico que sugirió por primera vez el desarrollo de impulsores genéticos en la edición de genes, el biólogo de Harvard Kevin Esvelt, ha advertido públicamente que el desarrollo de la edición de genes junto con las tecnologías de impulsores genéticos tiene un potencial alarmante de salir mal.

Señala la frecuencia con la que CRISPR falla y la probabilidad de que surjan mutaciones protectoras, lo que hace que incluso los impulsos genéticos benignos sean agresivos. Subraya que “sólo unos pocos organismos modificados podrían alterar irrevocablemente un ecosistema”. Las simulaciones de impulso genético por computadora de Esvelt calcularon que un gen editado resultante "puede extenderse al 99% de una población en tan solo 10 generaciones y persistir durante más de 200 generaciones".

A pesar de lo que pueda afirmar Bill Gates, uno de los principales financiadores de la edición genética, la edición genética no es una tecnología precisa en ningún sentido. En China, los científicos utilizaron embriones humanos donados por embriones que no podrían haber dado lugar a un nacimiento vivo, para editar un gen específico. Los resultados fueron un fracaso total, ya que las células analizadas no contenían el material genético deseado. El investigador principal, Jungiu Huang, dijo a Nature . “Por eso paramos. Todavía pensamos que es demasiado inmaduro”.

¿Laboratorio de armas biológicas de Georgia para aliados de los insectos?
¿Hay científicos locos en DARPA u otras agencias del gobierno de Estados Unidos preparándose para desatar nuevas formas mortíferas de agentes de armas biológicas contra adversarios como Rusia, hoy el productor de cereales más importante del mundo y un país cuyos cultivos están libres de organismos genéticamente modificados por ley? ¿O contra China, Irán o India…?

Una serie de informes recientes en los medios rusos y occidentales han puesto de relieve recientemente un biolaboratorio de alta seguridad financiado por el Pentágono cerca del aeropuerto de Tbilisi en Georgia, adyacente a Rusia.  El laboratorio, el Centro Richard G. Lugar para la Investigación en Salud Pública, una instalación de 350 millones de dólares, según informes de testigos presenciales georgianos, está construido según lo que se llama estándares de Bioseguridad Nivel III, lo que significa que puede manejar todos menos un puñado de los más peligrosos. microbios conocidos, incluido el ántrax y la bacteria que causa la peste bubónica. El centro cuenta con científicos del Comando de Materiales e Investigación Médica del Ejército de EE.UU.

A principios de este año, el ex Ministro de Seguridad del Estado de Georgia, Igor Giorgadze, concedió una entrevista de prensa en Moscú en la que dijo que tenía pruebas que confirmaban que el centro organizó experimentos arriesgados en los que murieron varias personas. Compartió sus pruebas con las autoridades rusas pertinentes.

Todo esto se lee como un capítulo de la novela de ciencia ficción Andromeda Strain de Robert Crichton de 1969, solo que no es ciencia ficción. Los tribunales de la UE han dictaminado que la edición de genes debe regularse como otra forma de OGM u organismos genéticamente modificados. Estados Unidos ha rechazado cualquier tipo de regulación.

No es difícil creer que las personas que rompen el tratado sobre Fuerzas Nucleares Intermedias de 1987 e imponen repetidas sanciones a los funcionarios y la industria rusos se sentirían tentadas a desatar o amenazar con desatar una nueva y aterradora arma biológica que, a través de miles de millones de virus editados genéticamente, insectos infectados destruirían el vital granero de Rusia, todo en nombre de la “paz mundial”.

¿Está el Pentágono, a través de DARPA, involucrado en una investigación de “doble uso” mediante el desarrollo de un arma biológica con el pretexto de un avance agrícola.? Hay quienes dirían: “Sí, pero nadie en su sano juicio se arriesgaría a lo que podría ser una alteración irrevocable de nuestro ecosistema”. Pero, como señaló un biofísico en relación con los organismos genéticamente modificados, hay algunas personas que no están en su sano juicio…”

F. William Engdahl es consultor y conferencista de riesgos estratégicos, tiene una licenciatura en política de la Universidad de Princeton y es un autor de best sellers sobre petróleo y geopolítica, exclusivamente para la revista en línea  “New Eastern Outlook”, donde se publicó originalmente este artículo. Es un colaborador frecuente de Global Research.

Ver comentarios

La Poderosa Tecnología del Tercer Reich

Publicado en por Skiper

Ver comentarios

Cómo Putin advertía a la OTAN y a Ucrania a lo largo de los años

Publicado en por Skiper

Ver comentarios

Armando Ucrania: Solo el 30% de las armas de la OTAN llegan a Ucrania (documental autocensurado de la CBS)

Publicado en por Skiper

Activar los subtítulos en el idioma correspondiente.

Ver comentarios

¿Qué tan letal es un arma hipersónica?

Publicado en por Skiper

Ver comentarios

SOTT Radio Network N.º 394, 24 de septiembre, 2022 - ¿Llevará la movilización militar rusa a la tercera guerra mundial?

Publicado en por Skiper

Ver comentarios

Máxima alerta de guerra global, Putin huye hacia adelante

Publicado en por Skiper

Ver comentarios

Los diez mandamientos de la propaganda bélica

Publicado en por Skiper

Los diez mandamientos de la propaganda bélica

Fuente: https://www.vozpopuli.com/altavoz/cultura/propaganda-belica-otan.html

Autor: Hásel-Paris Álvarez

Notas, por Skiper: 1-Los enlaces del artículo original no están presentes en este artículo pero puede consultarse en el artículo original. 2-Por problemas de censura las imágenes de redes sociales son solo capturas de pantalla. Las redes sociales citadas en el artículo se pueden consultar en el original del mismo. 3- He incluido el vídeo del artículo original sobre la guerra de Ucrania al final del artículo y no al principio del mismo.

A estas alturas todos hemos oído hablar de la manipulación rusa, las narrativas del Kremlin, la censura de Putin, los medios de propaganda como Russia Today y las fake news extendidas por bots rusos. Podríamos hacer el enésimo artículo sobre esta cuestión, pero creemos que hay otro enfoque de mayor interés. En toda guerra hay (por lo menos) dos bandos, cada cual con su propia propaganda bélica. Y da la casualidad de que nosotros (españoles, europeos y occidentales) formamos parte de un bando que libra contra Rusia una guerra global con medios militares, económicos e informativos.


El pez no percibe el agua en la que flota, igual que nuestros ciudadanos no suelen percibir la propaganda bélica en la que ellos mismos están inmersos. No estamos diciendo que las informaciones de nuestra prensa y televisión sean necesariamente mentira. Decimos que la forma en que se seleccionan, presentan, entrelazan e interpretan responden a unos marcos concretos, como veremos a continuación.

El año pasado se hicieron públicos documentos de la OTAN (organización a la que pertenecemos) sobre la 'guerra cognitiva' (cognitive warfare): cómo ganar la batalla del relato y modificar la forma en que pensamos. La peculiaridad de esta guerra es que no la libra un país contra otro, sino nuestras propias élites contra nosotros mismos. El gran campo de batalla no está en Ucrania, sino en la mente de cada uno de nosotros.

El autor pionero en analizar estas técnicas fue Arthur Ponsonby. En su obra Falsedad en tiempos de guerra (1928) expone las narrativas que los aliados utilizaron contra los alemanes en la Primera Guerra Mundial. Que sea un escritor británico nos ayuda a comprender mejor la mentalidad de la actual OTAN, que no es sino la enésima máscara del anglo-imperio, antiguamente asentado en Londres y hoy en Washington USA. El objetivo a batir ya no son los alemanes, pero se mantienen las viejas acusaciones: son belicosos, son enemigos del comercio, no son europeos civilizados, quieren invadir medio mundo, etcétera. Una germanofobia idéntica a la actual rusofobia o a la hispanofobia de antaño (cuando España era una rival del anglo-imperio y no su colonia).


Propaganda en nuestra época
La obra de Ponsonby ha sido sintetizada por la historiadora Anne Morelli en Diez mandamientos de la propaganda bélica (2001), que exponemos a continuación. Según analiza ella, siguen siendo perfectamente aplicables a guerras del siglo XXI como Siria o Afganistán. ¡Será que el decepcionante siglo XXI está moldeado por los mismos que ganaron las guerras del siglo XX!

1) Nosotros no queremos la guerra.

Queremos la paz en Ucrania. Aunque Alemania y Francia abandonaron los protocolos de paz de Minsk. Aunque Estados Unidos y Reino Unido presionen a Ucrania para que no firme con Rusia una paz que no sea ventajosa para aquellos. Aunque la OTAN sólo busque prolongar el conflicto y maximizar las bajas a base de enviar misiles y drones. Aunque el plan de Occidente, confesado por figuras como Hillary Clinton o Douglas Lute, sea convertir Ucrania en Afganistán (es decir, una guerra enquistada) y al resto de Europa en Pakistán (es decir, un polvorín inestable).

Los diez mandamientos de la propaganda bélica

2) La guerra es culpa exclusiva del enemigo.

El angloimperio ni siquiera guerrea o invade, eso solo lo hace Rusia. Compruébelo en Wikipedia: Iraq 2003 fue solamente una 'intervención', Haití 1994 una 'operación', Corea 1950 una 'acción policial' y Malasia en los cincuenta una 'emergencia'. La OTAN no es más que una organización ¡defensiva!, por mucho que se haya dedicado a la guerra de agresión desde Yugoslavia hasta Libia. Desplegar sistemas de misiles por toda Europa se trata de un 'escudo'. Las sanciones económicas o las operaciones para desestabilizar gobiernos no han buscado conflictos, sino favorecer la paz, la libertad y la democracia. Y Rusia es culpable por no saber apreciarlo.

Encuentra la diferencia.

Encuentra la diferencia.

3) El líder enemigo es malvado.

La propaganda del angloimperio sigue la teoría individualista y meritocrática de Thomas Carlyle: la Historia es el producto de líderes excepcionales. O sea, Rusia es Putin. Pero, como es costumbre en el liberalismo, todo está entendido al revés. Los grandes líderes no son los que inoculan en las masas su ideario personal, sino los que logran identificarse a sí mismos con un clamor popular. Buena parte del pueblo ruso (y no solamente Putin) exige recuperar su dignidad nacional a cualquier coste.

Pero lo más sencillo para la humanidad es, como buenos mamíferos, reconocer y odiar un único rostro. Dentro de la humanidad, los occidentales en concreto somos muy sensibles a la polarización ideológica, así que nos presentan a Putin como alguien detestable para ambas trincheras políticas: a la vez un neosoviético de extrema izquierda y un neozarista de extrema derecha. Dentro de Occidente, los europeos en particular estamos obsesionados con el psicoanálisis, así que nos convencen de que Putin es directamente un loco, un megalómano, un psicópata.

Por el contrario, los comandantes ultranacionalistas ucranianos combaten por la moderación democrática. El comisionista Borrell (UE) y el banquero Stoltenberg (OTAN) luchan contra los oligarcas. Qué autenticidad desprende el actor profesional Zelenski. Y qué encomiable salud mental posee el octogenerio Biden.

4) Defendemos una causa noble, no nuestro interés particular.

Occidente está defendiendo la integridad del Estado-Nación, aunque en Serbia con Kosovo no era de nuestro interés. Defendemos el derecho para cada país de unirse a la alianza militar que prefiera, aunque en Cuba con los misiles soviéticos no era de nuestro interés. Defendemos la posibilidad de que países cercanos accedan a la Unión Europea, aunque en Turquía no era de nuestro interés. Defendemos la legítima resistencia de un pueblo invadido, aunque en Sáhara o Palestina no es de nuestro interés. Defendemos las libertades políticas, mediáticas y sexuales, aunque todo ello esté más comprometido en Ucrania que en Rusia.

Circula por Internet una lista negra de supuestos 'Altavoces del Kremlin' en España que incluye a Javier Couso, Juan Manuel de Prada, Pedro Baños, César Vidal, Pedro Insua...


5) El enemigo comete crímenes de guerra, nosotros sólo cometemos errores.

Los cadáveres que Rusia deje atrás saldrán una y otra vez en los mismos medios de comunicación que prohibieron emitir soldados muertos en Iraq, niños muertos en atentados yihadistas en Europa o ancianos muertos por la covid. Los crímenes cometidos por Rusia son constitutivos de genocidio, no así los de Ucrania en el Donbás durante años. Los rusos están atacando zonas civiles porque sí. Los ultranacionalistas ucranianos montan ¡solamente por error! sus puestos de mando en teatros, sus posiciones de ataque en residencias, sus almacenes de armamento en guarderías.

Si estos neofascistas ucranianos torturan y ejecutan a prisioneros de guerra con las armas que nosotros les hemos enviado, sin duda se trata de un trágico error impredecible. Como nuestras armas que acabaron accidentalmente en manos de talibanes afganos, guerrilleros centroamericanos o yihadistas sirios. Errores. Eso sí, desde que Ponsonby redactó estos mandamientos, Occidente ha dejado de disculparse por sus 'fallos'. Tanto Harry Truman como Madeleine Albright han bajado al infierno defendiendo lo acertado que fue el bombardeo atómico de Japón y la muerte de medio millón de niños iraquíes.

6) El enemigo utiliza armas prohibidas.

Nuestros medios de comunicación especulan con que Rusia use misiles de nuevo tipo, armamento nuclear y ataques químicos. La realidad es que Rusia había renunciado a varias de estas armas en los tratados de Misiles Antibalísticos (ABM), Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio (INF) y Armas Químicas (CWC). EEUU, por el contrario, abandonó los dos primeros tratados y ha postergado el tercero como mínimo hasta 2023. Esto no lo cuentan nuestros medios, ni tampoco la pretensión de Ucrania de rearmarse nuclearmente, ni la presencia en Ucrania de minas y municiones ilegales, ni las sospechas de amenaza biológica en los laboratorios de EE.UU. en Ucrania.

Los diez mandamientos de la propaganda bélica

7) Las pérdidas de enemigos son enormes, nosotros apenas sufrimos.

Primero nos cuentan que Rusia buscaba derrotar a Ucrania en una semana, para poder decir luego que Rusia ha fracasado. Cuando Rusia está consolidando sus posiciones en el frente, se nos dice que se ha estancado. Cuando concentra su actividad en la región oriental (como había anunciado desde un primer momento) nos cuentan que se está retirando. Destacaremos cada pérdida material del bando ruso y callaremos su éxito arrollador en la desmilitarización de Ucrania: todas las infraestructuras, puestos de mando, sistemas de radares, armamento y comandos que la OTAN ha perdido para siempre.

8) Los intelectuales y artistas apoyan nuestra causa.

Eurovisión, Disney, la UEFA, los Grammy y la federación de gatos domésticos rechazan las acciones de Rusia. Nuestras élites políticas se ponen en la solapa una chapita con la bandera ucraniana donde antes estaba su bandera nacional, el rosco de la Agenda 2030, un lazo amarillo o cualquier otra cosa.

Para el angloimperio es crucial este soft power: las celebrities y su star system. El problema es que, fuera de los escenarios, buena parte de nuestras sociedades no apoya el envío de armamento a Ucrania. Pero el grueso de la opinión pública rusa sí secunda la guerra. En su día se trató de antioccidentales a autores tan dispares como Pierre Bourdieu, Régis Debray y Noam Chomsky por oponerse a la Guerra del Golfo


9) Nuestra causa es sagrada.

Otro mandamiento muy angloamericano, relacionado con el puritanismo moral, con George W. Bush y su “eje del bien contra el eje del mal”. Biden repite estos días que la OTAN es un “vínculo sagrado”: la Nueva Alianza, la Santa Guerra Nuclear. Ideólogos yankis como Michael Walzer han retorcido la doctrina de la Guerra Justa de San Agustín. En la tradición occidental, Guerra Justa era aquella que no buscaba dañar a inocentes.

En la doctrina OTAN, Guerra Justa es aquella que permite matar inocentes de forma deliberada, con tal de conseguir sus justísimos objetivos. Este vocabulario religioso funciona menos en nuestra Europa laica, pero aquí justificamos las guerras en nombre de nuestros nuevos dioses: defender la democracia contra la tiranía del Kremlin, defender el feminismo contra el machuno Putin, defender el ecologismo contra la Rusia gasístico-nuclear, etcétera.


10) Quien dude de nuestra propaganda es un traidor.

En su día se trató de antioccidentales a autores tan dispares como Pierre Bourdieu, Régis Debray y Noam Chomsky, por oponerse a la Guerra del Golfo. A los que criticaron el bombardeo de Yugoslavia desde la izquierda y la derecha, se les englobó bajo el término 'rojipardos' (¿le suena?). Ahora está circulando por Internet una lista negra de supuestos “altavoces del Kremlin en España”.

Incluye (además de al arriba firmante): a rojos como Javier Couso, fachas como Javier Villamor, un tuitero anónimo y un famosísimo youtuber, un civil pacifista y un veterano militar como Pedro Baños, también al católico Juan Manuel de Prada, el protestante César Vidal y el ateo Pedro Insua. Se diría que no tienen nada en común, salvo una cosa (y no es cobrar en rublos): el indudable patriotismo de todos ellos. Pese a todo, son señalados como traidores.

Todo el que sea crítico con nuestra propaganda bélica, o siquiera ecuánime entre la propaganda de unos y otros, es sospechoso de traición. Y eso le incluye a usted, por leer y difundir textos como este. Tenga cuidado.

Ver comentarios

La inteligencia artificial en la guerra

Publicado en por Skiper

Ver comentarios

Guerra psicológica entre la OTAN y Rusia. ¿Qué ocurrió con el crucero Moskva?

Publicado en por Skiper

Guerra psicológica entre la OTAN y Rusia. ¿Qué ocurrió con el crucero Moskva?

Fuente: https://noticiasholisticas.com.ar/guerra-psicologica-entre-la-otan-y-rusia-que-ocurrio-con-el-crucero-moskva-por-marcelo-ramirez/

Autor: Marcelo Ramírez

El desconcierto y la guerra psicológica comienzan a verse a pleno en la guerra entre la OTAN y Rusia.

La noticia de la semana fue el hundimiento del crucero clase Slava de la Armada rusa “Moskva”, que era el buque insignia de la Flota del Mar Negro.

La noticia, sin embargo, se ha reducido apenas a un hecho indiscutible, el buque se hundió, pero a partir de allí se han tejido innumerables hipótesis de lo que ha sucedido. Pasando en limpio podemos citar en primer lugar que Ucrania se atribuyó el hundimiento sosteniendo que fue el resultado del impacto de dos misiles Neptune.

A poco de analizar esta noticia vemos que resulta bastante improbable y parece responder a una dosis de oportunismo de Kiev que cada día es más reducida en sus capacidades militares mientras su PBI se desploma un 40% como consecuencia de la guerra y el país se endeuda con miles de millones en dólares que los Estados occidentales proporcionan en armamentos de todo tipo y nivel, desde algunos francamente obsoleto hasta otros modernos y peligrosos.

Los misiles Neptune que dice haber usado Ucrania son un derivado de ese país del misil soviético KH-35, su alcance teórico es de 250 km y la masa de su cabeza explosiva es de unos 150kg, lo que lo hace apto para buques menores a 5.000 toneladas de desplazamiento. 

El Moskva tenía 12.500 toneladas y era demasiado grande para los Neptune, que además solo se construyeron 6 como un ensayo, pero nunca entraron en producción masiva.

No es el único problema, los especialistas en el área de misiles consideran bastante improbable que Kiev tenga capacidades para ubicar a 150 km al Moskva y guiar los misiles con precisión hasta el mismo llegando a la distancia donde el propio radar del misil pudiera completar la tarea.

Para ello debería haber contado con el apoyo iluminando el blanco de un avión P8 o Awacs de la OTAN, lo que agravaría el cuadro y que puede ser la explicación de la reticencia de Washington a aceptar la versión ucraniana.

Dicha versión se completa con un drone Bayraktar TB2 que actuó como distracción haciendo que los sistemas no vieran los misiles aproximándose. Esta versión es desechada porque los sistemas de detección del buque podían monitorear múltiples objetos a la vez.

Moscú por su parte señala como causa del hundimiento un incendio cuyos factores se desconocen. Esta clase de buques son bastante viejos y sus prestaciones pueden ser superadas por otros menores y sustancialmente más económicos como las pequeñas fragatas “Admiral Essen” y “Admiral Makarov” que lanzan misiles de alta precisión a una distancia de hasta 2,5 mil kilómetros, superando holgadamente los 700 km de los Vulkan que tenía el buque hundido.

Esta falla en el sistema antiincendios ya había sido señalada en la clase Slava, solo el crucero Mariscal Ustinov de la Flota del Mar del Norte había sido modernizado. La política rusa ha decidido invertir los recursos de las modernizaciones en otros tipos de naves como las mencionadas, que tienen mayor fuerza de impacto con los misiles Kalibr y los hipersónicos Tsirkón como los que porta la fragata Almirante Gorshkov de la clase homónima.

Los rusos citan antecedentes históricos de otros buques en los cuáles un incendio pudo haber hecho detonar la carga de misiles que portaban, por lo que se deducen que deberían haber modernizado la nave para prevenir esto, algo que como explicamos por su costo permite construir varias nuevas, lo que desaconseja la inversión.

Otras hipótesis barajadas son que haya chocado con alguna de las minas que los ucranianos dejaron boyando en el Mar Negro. Carentes ya de flota propia, los militares ucranianos decidieron colocar 400 minas sembradas y que están navegando a la deriva para complicar la navegación en el Mar Negro. Estas minas pudieron ocasionar el estallido, esta medida es peligrosa para los buques militares y civiles que puedan estar en el área y ya habían despertado alertas. Las características del Mar Negro con tempestades, aguas oscuras y grandes olas hacen extremadamente difícil ver las mismas y pudo haber tropezado el Moskva contra una de ellas.

Una hipótesis plausible es que los ucranianos, o militares pertenecientes a la OTAN hayan podido emplear los misiles antibuques AGM-84 Harpoon que el Reino Unido anunció que iba a suministrar a Ucrania. Estos misiles tienen una ojiva mayor (221 kg) a las Neptune pero su rango máximo llega a los 150 km y estaría dentro de los límites del misil. Dicho sea de paso, resulta poco creíble que el Neptune duplique el alcance del Harpoon, pero Kiev tiene una marcada tendencia a exagerar sus logros.

El punto de lanzamiento se cree que se situó en Odessa o en Rumania, una hipótesis más complicada por las consecuencias, pero hay que recordar que este país tiene reclamos sobre la isla Serpetine, que se hizo famosa por los soldados ucranianos que murieron en combate heroico contra el enemigo ruso y precisamente contra este mismo buque Moskva, aunque posteriormente estos soldados reaparecieron en manos rusas aclarando que se rindieron sin combatir y molestos porque Kiev los había abandonado y luego intentando hundir el buque que los trasladaba a Sebastopol.

Una hipótesis más es que hayan sido buzos tácticos que hayan colocado cargas de profundidad como sucedió con el buque insignia de la Flota del Mar Negro, el acorazado Novorossiysk que fue hundido presuntamente por cargas explosivas colocadas por buzos tácticos italianos, aunque hay más de una versión de lo que pasó con ese buque. Sin embargo, es muy difícil que haya sucedido lo mismo en el Moskva porque estaba demasiado alejado de tierra y Ucrania no tiene buques ni submarinos para acercarse, y si de alguna manera hubieran conseguido llegar hasta allí es extremadamente difícil que los buzos pudieran haber colocado las cargas en un buque en movimiento y con sistemas de alerta contra estas acciones.

Como vemos, mucha especulación, pero seguramente por algún tiempo no sabremos qué pasó en realidad y solo escucharemos las versiones de la prensa que es parte del conflicto y por lo tanto carece de objetividad.

El buque Moskva tenía poca importancia militar y Rusia lo puede reemplazar sin problemas, sin embargo, tiene una gran importancia simbólica por su nombre que en ruso significa Moscú, y por su trayectoria legendaria en la que muchos marinos y jefes de alta graduación de la Armada rusa han pasado a revistar entre su dotación.

Esto está produciendo una ola de indignación en Rusia donde muchos se preguntan por qué razón ha empleado Rusia menos del 8% de sus capacidades militares en Ucrania y por qué razón tiene tantas contemplaciones con los civiles si, al fin y al cabo, la prensa siempre dirá que las muertes son de su responsabilidad. Muchos creen que, si te van a pintar como el malo de la película, es necesario entonces asumir el papel y dar miedo de verdad.

La respuesta no es simple, nadie sabe exactamente qué pretende hacer Rusia, sus tácticas habituales esconden la verdadera estrategia como hemos visto luego de la penetración por el norte hacia Kiev y más tarde con la retirada voluntaria, acelerada e intempestiva para re posicionarse sobre el sudeste.

Rusia no sigue los patrones occidentales y sus acciones suelen no ser comprendidas por Occidente, las tropas rusas suelen combinar elementos modernos con otros que los occidentales consideran obsoletos.

Un ejemplo de ello son las cartas de navegación empleadas, una anécdota rusa cuenta que recibieron una visita de una delegación de oficiales de un barco extranjero. Uno de los invitados notó el uso de un sextante y se rio diciendo que es increíble los dispositivos antiguos que todavía usan estos rusos. El comandante de ese oficial risueño notó esto, se le acercó y le dijo: “Te estás riendo en vano. Un día, todos los sistemas satelitales fallarán, pero podrán determinar la ubicación de su nave a la antigua, y usted no podrá ubicar la suya”. Cabe recordar que Rusia y China han dado mucha atención a las armas antisatélites y la tecnología puede ser una trampa si Moscú decide golpear los sistemas de comunicación occidentales.

En estos días hemos conocido que Rusia por primera vez atacó las líneas de aprovisionamiento de Ucrania desde EE UU derribando un avión de transporte militar que llevaba armas de EEUU y que se sospecha contenía misiles Harpoon, pero aún es más inquietante que pueda haber armas de mayor alcance porque las autoridades estadounidenses no niegan esa posibilidad, que “está en estudio”.

¿Por qué razón el gobierno de Vladimir Putin no ordena la destrucción de todas las líneas de entrega y deja operar al Pentágono sin sobresaltos?

Rusia ha dado pasos muy duros en materia financiera socavando el poder del dólar prescindiendo de esa moneda y del euro para el comercio de la energía, y eso es un disparo debajo de la línea de flotación de los EEUU.

Todos saben que EEUU puede sostener un ejército de enorme magnitud con cientos de bases a lo largo del mundo, un gigantesco aparato de Inteligencia, capacidad para sobornar políticos, medios y jueces en buena parte del mundo, y todo ello se basa en el poder del dólar. Con una constante balanza comercial cuyo déficit se disparó un 27 % en 2021 con respecto al año anterior alcanzando los 859.100 millones de dólares. La fragilidad económica es visible. La UE tiene un déficit de 10 mil millones, pero es esperable que a raíz de las sanciones el déficit suba exponencialmente debido a los altos costos energéticos, de alimentos y la parálisis de buena parte de la industria.

Nuevas advertencias del empresariado alemán que alertan que sin suministro de gas ruso tendría interrupciones en la labor de la industria alimenticia alemana, segunda en importancia luego de la química, según declara Guido Zeitler, presidente del sindicato de esa rama Nahrung Genuss Gaststätten (NGG), lo que se suma a las advertencias de BASF sobre que deberá paralizar sus planes por carecer de materia prima.

¿Cómo hará EEUU con un socio rumbo al colapso como la UE y cada vez más países que dejan de usar el dólar en sus intercambios comerciales? La situación no tardará en volverse crítica, si los países más importantes no demandan dólares, esos dólares excedentes volverán a la economía estadounidense acelerando la inflación aún más y la receta de la FED parece ser frenar la actividad económica esterilizando la plaza, el resultado óptimo para una enorme caída económica con consecuencia de desempleo y protestas sociales.

La endeblez producida por la pérdida de protagonismo del dólar y el euro ocasionará que se acelere la caída de la economía y sea imposible seguir financiando un ejército y armas más novedosas. Lo mismo que venimos viendo, pero en forma más vertiginosa.

Entonces bien podemos preguntarnos cuánto resistirá la hegemonía de las elites anglosajonas que han visto derrumbarse la globalización y qué salida hipotética tienen.

La guerra en escala planetaria para derrotar a Rusia, luego a China y más tarde deberá someter a India para poder seguir humanizando el planeta.

Putin sabe todo esto y ha movido inteligentemente sus piezas en el terreno financiero, pero en el militar hoy hay dudas de si era lo correcto. Las informaciones indican que Ucrania se preparaba para atacar el Donbass y Crimea, hacer algo así contra Rusia es porque ha sido impulsada por alguien muy poderoso que no puede ser otro que la OTAN que le ha prometido su apoyo, lo que explica las rabietas de Zelensky demandando apoyo militar y económico a los líderes europeos y el silencio de estos ante las reprimendas.

El cerebro de la OTAN, los EEUU, le han prometido protección para envalentonar a Zelensky pero lo usan para desgastar a Rusia en una guerra interminable a costa de Ucrania. Rusia ha invadido ante los hechos consumados, pero su acción es expectante, ha intentado negociar con Zelensky pero éste ha dado marcha atrás con sus iniciativas luego de ir a consultas. ¿Puede haber otra explicación para esta situación? No parece probable.

El globalismo que anida en Washington sabe que no puede perder la partida financiera porque perderá la económica y a la larga, la militar, por lo cual pone en marcha las políticas que hemos visto con una feroz propaganda dirigida principalmente a su propia población para convencer a los occidentales de que Rusia es un tigre de papel que debe ser eliminado porque es una amenaza al sistema mundial. 

Rusia sigue en una especie de stand by militar, pese a las provocaciones deja a la OTAN hacer pacientemente, seguramente tratando de ganar tiempo para que las poblaciones occidentales vean el resultado de las sanciones y se amotinen contra sus gobiernos, encabezados por personajes muy poco serios como Johnson, Macron o el propio Biden.

Esta es una opción, aunque tal vez Putin sabe que la guerra es inevitable como alguna vez sugirió su canciller Lavrov y que como dice el Alto Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad y vicepresidente de la Comisión Europea, Josep Borrell, quién asegura que el futuro se decidirá por vía militar.

Putin bien puede dejar hacer para mostrar al mundo y a sus propios ciudadanos que la OTAN busca la destrucción rusa y que por ello deberá actuar al costo que sea si quiere evitar que Rusia desaparezca de la faz de la tierra.

No sabemos cuál es el pensamiento de Putin, pero sí sabemos que Rusia es una potencia militar que puede destruir a la OTAN en minutos si hace uso de su verdadero arsenal estratégico y hacer lo propio con EEUU, a riesgo de sufrir daños extremos como represalia.

Muchos analistas occidentales creen que Rusia no tiene más capacidades que las demostradas y que si confronta con la OTAN será rápidamente derrotada, algo muy peligroso porque no es la verdadera situación y es fruto de la intensa propaganda mediática que corre el riesgo de ser creída por los propios actores.

La maskirovka rusa, el arte del engaño al enemigo no revelando las verdaderas intenciones bien puede ser lo que hoy estamos viendo, no pudiendo asegurar por qué Rusia no responde con todo su poder, ¿intenta no confrontar militarmente con Occidente o busca una justificación para desplegar todo su potencial sin miramientos?

La pregunta carece de respuesta, pero hay algo en claro, si no hay una definición militar el ocaso del globalismo occidental es un hecho, su respuesta para evitar el ascenso de un nuevo modelo mundial solo puede ser militar. Lo que no podemos asegurar es cómo actuará Rusia, sabe que el tiempo les dará mayor fortaleza y debilidad a sus enemigos, pero también que puede ser atacado en cualquier momento. 

Nadie creyó que Occidente iba a congelar los fondos rusos y que se involucraría hasta Suiza, si dio ese paso que equivale a una declaración de guerra bien puede dar un mismo golpe, pero militar.

¿Golpear primero o esperar a ver qué sucede? Esa es la incógnita que debe responder Putin, un líder que se caracteriza por no ser emocional e impulsivo y sopesar muy bien sus acciones no equivocándose en la política empleada hasta el momento.

Ver comentarios

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 > >>